Cómo comenzar con tu propio sistema de gestión del conocimiento (PKMS)

No existe un Sistema de Gestión del Conocimiento Personal (PKMS por sus siglas en inglés) "correcto". Un PKMS es fundamentalmente una herramienta personal—un sistema diseñado para ayudarnos a gestionar y organizar nuestro propio conocimiento y su gracia radica en su flexibilidad y adaptabilidad a nuestras necesidades y preferencias individuales.

Evalúa los siguientes puntos para construir tu PKMS

1. Personalización: Lo que funciona para una persona puede no funcionar para otra. La eficacia de un sistema PKMS se determina por lo bien que se alinea con nuestros procesos de pensamiento, hábitos de trabajo y estilo de aprendizaje.

2. Experimentación: La mejor manera de encontrar un sistema PKMS que nos convenga es mediante prueba y error. No debemos temer experimentar con diferentes herramientas, métodos y enfoques.

3. Flexibilidad: Nuestro sistema PKMS ideal debería ser capaz de evolucionar con nosotros a medida que nuestras necesidades y circunstancias cambian con el tiempo.

4. Simplicidad: A veces, los sistemas más simples son los más efectivos. No debemos complicar excesivamente nuestro PKMS a menos que la complejidad realmente nos aporte valor.

5. Funcionalidad: Elijamos herramientas y métodos basándonos en lo bien que satisfacen nuestras necesidades específicas, no en su popularidad o complejidad.

Aprendiendo de los Errores

Mi experiencia personal ilustra la importancia de estos principios. Inicialmente, me obsesioné con crear un sistema PKMS "perfecto", utilizando múltiples aplicaciones y métodos complejos.

Pasé más tiempo organizando y reorganizando mi sistema que realmente utilizándolo para aprender y crear.

Me di cuenta de mi error cuando noté que, a pesar de todo mi esfuerzo, no estaba reteniendo ni aplicando la información de manera efectiva. Decidí simplificar drásticamente mi enfoque, centrándome en una sola aplicación de notas y un método de etiquetado sencillo. Esta simplificación me permitió concentrarme más en el contenido y menos en el sistema en sí.

Desde ese punto de partida, fui paso a paso agregando funcionalidades y otras aplicaciones a medida que las iba necesitando. Un acercamiento modular y evolutivo me sirvieron mucho más que comenzar con todo ya construido.

Apps recomendadas para comenzar

A pesar de mi experiencia personal con la simplificación, es importante reconocer que existen diversas herramientas que pueden ser útiles para implementar un sistema PKMS efectivo, dependiendo de las necesidades individuales.

Algunas aplicaciones que pueden ayudarte a llevar un sistema PKM son:

1. Obsidian: Una aplicación de notas basada en Markdown que permite crear enlaces entre notas y visualizar conexiones.

2. Notion: Una herramienta todo en uno que combina notas, bases de datos y gestión de proyectos.

3. Evernote: Una aplicación clásica de toma de notas con capacidades de organización y búsqueda avanzadas.

4. Roam Research: Un sistema de notas que se centra en las conexiones bi-direccionales entre ideas.

5. OneNote: Una aplicación de Microsoft que ofrece una experiencia similar a un cuaderno digital con opciones de organización flexibles.

En mi caso personal estoy usando Roam Research y DevonThink para mi PKMS, sin prejuicio de que siga probando y evaluando otras aplicaciones por mi trabajo.

Conclusión

Finalmente, el objetivo del PKM es mejorar nuestra capacidad para capturar, organizar y utilizar el conocimiento de manera efectiva. Si nuestro sistema logra este objetivo, entonces es el sistema adecuado para nosotros, independientemente de lo que otros puedan estar usando.

Como nota final, estoy también volviendo a usar un sistema de papel y archivadores para botar ideas de manera más creativa. ¡A cada quien lo que más les sirva!